HAZ LA DIFERENCIA, ACTÚA 
Prevenir la violencia sexual en la infancia 

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible han reconocido que la violencia contra los niños y niñas es un obstáculo para lograr alcanzar el desarrollo sostenible, su expresión más aberrante a través de la violencia sexual infantil es una realidad que convive con nosotros cotidianamente, pues se calcula que en el mundo cerca de 150 millones de niñas y 75 millones de niños son víctima de algún tipo de violencia sexual (abuso sexual intrafamiliar, utilización en pornografía y prostitución, corrupción, acoso a través de Internet y abuso entre iguales), endureciéndose la situación de los y las menores que viven en países en vías de desarrollo, los afectados por catástrofes naturales, y en zonas de conflicto y post conflicto. Una realidad global que ha existido siempre a lo largo de la historia, pero que aún está oculta por su carácter delictivo inherente, así como por el silencio de sus víctimas.  
Fundación Más Vida, es una ONG aragonesa que forma parte de la Red para la Prevención del Abuso Sexual Infantil y Adolescente en España, y promueve a través de sus diferentes actuaciones la campaña europea “Uno de Cada Cinco”, pues se estima que tan sólo en Europa uno de cada cinco menores es víctima de violencia sexual, incluido el abuso sexual. En la mayoría de los casos, el agresor suele ser una persona del entorno cercano del menor. Un factor que condiciona la denuncia, pues tan sólo el 2% de los casos salen a la luz.  
Nuestro objetivo es poder ofrecer a las familias (padres/madres) y/o educadores una herramienta de trabajo sencilla que les permita explicar a los niños y niñas como protegerse. Algunos menores no saben reconocer donde otras personas no pueden tratar de tocarles por falta de información, porque no asocian ciertos tocamientos, caricias o besos a ese tipo de prácticas. Por ello, es conveniente brindarle esta información, para que sean conscientes que caricias son buenas y que caricias son malas, para que sepan cómo reaccionar y además, para que sepan a quien dirigirse si necesitan ayuda. Debemos intentar que los niños y las niñas no tengan miedo a afrontar y contar sus problemas, por ello también damos algunas pautas para la actuación de los padres frente a esta problemática.