Os dejamos por aquí algunas fotos y vídeo de vuestros hij@s disfrutando y aprendiendo francés.
Primero, entramos. Después, dejamos los abrigos. Una vez en la mesa, los profes nos explican la carta para poder pedir nuestra bebida y nuestra crepe favorita.
Luego los camareros nos traen nuestra merienda y la disfrutamos con los amigos.
Como en cualquier restaurante, tenemos que pagar ¡y estar muy atentos a las vueltas!
Pero… ¿Cuántas crepes os habéis comido?
Acabamos con las tripas llenas y una sonrisa de oreja a oreja.
¡Muchas gracias a las organizadoras, voluntarios y profes que han participado! Sin ellos no sería posible.